PILAR PASCUAL Y ANGEL CASORRAN HOMENAJEADOS POR TODA UNA VIDA DE TRABAJO EN LA HUERTA DE ZARAGOZA

En la mañana de este sábado 27 de abril convocados por la Plataforma en Defensa de la Huerta de Zaragoza con el apoyo de la Junta y la Asociación Vecinal de La Cartuja Baja se ha rendido homenaje a dos personas hortelanas que han dedicado toda su vida a cultivas hortalizas para alimentar a la ciudad y que recientemente se han jubilado. Este acto se celebra en el mes de Abril, de la Lucha Campesina

Desde el Centro Cívico de la Cartuja, alrededor de 50 personas se han dirigido hasta la huerta de alcachofas de Pilar y Ángel, donde se ha procedido a leer un escrito en el que se reflejaba el reconocimiento al trabajo de Pilar y Pascual, un trabajo que empezaron de jóvenes o incluso niños, cuando sus padres, madres y sus abuelos y abuelas ya lo hacían. Asimismo, Pilar ha recogido el diploma que personas de la Plataforma de la Huerta le han hecho entrega.

En la lectura además de reconocer este homenaje a estas personas se ha querido hacerlo extensivo a los hortelanos y hortelanas que hoy quedan en la ciudad. En el acto se ha expresado que Zaragoza que contó con una de las huertas más importantes de nuestro país, ha dado la espalda a la misma, sin apoyo institucional y sin que la población nos preguntáramos de dónde vienen los alimentos que consumimos, de tal forma que los hortelanos y hortelanas han ido despareciendo y hay muchas dificultades para el relevo generacional.

Como ha indicado Pilar de alrededor de 600 hortelanos que había en los años 80 hoy ya no quedan más que una treintena y mayores de 50 años. Tal como ella ha expresado mientras en la cercana Tudela se celebra desde los años 80 La Fiesta de la Verdura, en Zaragoza las instituciones no han apoyado a sus hortelanos y hortelanas: “nunca se ha hecho una celebración de la huerta ni una feria de la alcachofa o la borraja”, de tal forma que la mayoría se han visto abocados a alquilar sus campos para la alfalfa que se exportan a los Emiratos Árabes mientras la ciudad importa la mayoría de los alimentos que forman parte de nuestra alimentación, cuando podríamos abastecernos de productos

de cercanía, más sanos y sabrosos y mejores para el medio ambiente y la economía local.

En el acto se ha querido dar un punto de optimismo, Zaragoza cuenta con tierra

productiva y con una red de acequias históricas desde tiempos de los romanos que permitirían revertir esta situación pero para que ello sea posible se requiere que la población valoremos el trabajo de las personas que se dedican al oficio de hortelano y hortelana, elijamos sus productos en nuestra cesta de la compra y demandemos a las administraciones una mayor impulso y apoyo a la huerta de Zaragoza. Entre algunas de las medidas aportadas entre los asistentes se ha indicado la necesidad de una mayor difusión de la marca Huerta de Zaragoza, un sello identificativo que se puso en marcha hace un año y que permite identificar las hortalizas que se han producido en la huerta de Zaragoza y acercarlas a las personas consumidoras pero que todavía se conoce poco en la ciudad, por otra parte campañas de sensibilización y un compromiso municipal para que los menús de los servicios municipales ( escuelas infantiles, albergue , casa amparo, banco de alimentos etc..) cuenten con productos de la huerta de Zaragoza, de manera que se pueda fortalecer el tejido de producción y distribución local,

El acto ha terminado con una sabrosa degustación de productos de la huerta y una demanda de la población para que se realicen más actos que den a conocer la huerta de Zaragoza.